Los asegurados ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) cuentan con la Incapacidad Temporal de Trabajo (ITT), ya que están expuestos a riesgos, que pueden provocar accidentes o enfermedades dentro o fuera de su lugar de trabajo.
La ITT amortigua el impacto económico que se genera cuando el trabajador no puede desempeñar sus actividades.
La Incapacidad Temporal para el Trabajo, según el Artículo 137 del Reglamento de Prestaciones Médicas del IMSS, es “la pérdida de facultades o aptitudes físicas o mentales que imposibilitan parcial o totalmente al asegurado para desempeñar su actividad laboral habitual por algún tiempo”.
Cuando el daño a la salud corresponde a un accidente o enfermedad producidos dentro del trabajo, se otorga una ITT por el ramo de Riesgo de Trabajo (RT).